VILLALOBOS PIDE RESPUESTAS SOLVENTES E INMEDIATAS PARA LA FINANCIACIÓN LOCAL, EL DESTINO DEL SUPERÁVIT, LAS PLUSVALÍAS O LA REVISIÓN DEL TECHO DE GASTO

El presidente de la FAMP y de la Diputación ha ofrecido nuemorosos datos en todos los apartados que ha desgranado, para demostrar que ‘son cuestiones de vital trascendencia para las entidades locales’

El presidente de la Cámara de Comercio asegura que «al igual que las diputaciones y Ayuntamientos, la Cámara de Comercio de Sevilla se siente un organismo vertebrador de la economía y las empresas de nuestra Provincia».

‘El municipalismo postcrisis puede caer del lado del optimismo o del pesimismo, dependiendo de cómo se resuelvan los grandes temas que aun hoy siguen pendientes’. Esa es la principal reflexión que ha dejado el presidente de la FAMP y de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, en la conferencia ‘El municipalismo postcrisis. ¿Optimismo o pesimismo?’, que ha pronunciado en el foro que la Fundación Cámara de Sevilla organiza en el Club Empresarial Antares.

El presidente de la FAMP ha sido presentado por su homólogo en la federación de municipios catalanes, Xavier Amor, que ha destacado la impronta cercana y pegada a los Ayuntamientos que el mandatario sevillano imprime a su acción de gobierno. También han asistido al evento numerosas personalidades del ámbito de la política, de la empresa y del ámbito social.

Villalobos inició su intervención recordando ‘el gesto de generosidad’ que siempre ha caracterizado a los Ayuntamientos y diputaciones, que ‘cedieron el paso a la España de las Autonomías en el arranque de la democracia’, para después desplegar las reivindicaciones que actualmente están en la agenda municipalista.

Acerca del momento presente, el presidente de la FAMP y de la Diputación de Sevilla considera que las entidades locales siguen ‘a merced de los antojos y las ocurrencias caprichosas de los que quieren seguir tutelándonos a toda costa y, por eso, no sabemos si apostar por el pesimismo o el optimismo en nuestra situación actual’.

Ante dicha coyuntura, el responsable de la FAMP considera que ‘es imprescindible que a este muncipalismo postcrisis que practicamos se le suelte de la mano de una vez, que se le deje ir solo y que, además, se le ofrezcan respuestas que traigan consigo la misma solvencia, capacitación y cercanía que los Consistorios practicamos a diario’.

Ahí ha encuadrado Villalobos cuatro asuntos: una nueva ley de financiación justa, la aplicación del superávit en lo que decidan los Ayuntamientos, la revisión del techo de gasto y la reformulación del impuesto de plusvalías.

Nueva ley de financiación Justa

En lo que concierne a una nueva ley de financiación justa, el presidente ha apostado por ‘elaborar un catálogo de servicios públicos locales y provinciales, que lleve al lado su coste efectivo y real y, una vez hecho esto, cerrar el círculo fijando cantidades, porcentajes en participación de ingresos estatales y autonómicos y una nítida definición de impuestos locales con cuantías. Y todo eso a la Constitución. O al menos, a una Ley Orgánica con el consenso, respaldo y apoyo de una amplísima mayoría del Congreso’.

En esa línea, ha solicitado ‘un ejercicio de honestidad y responsabilidad compartida a todas las administraciones para que tengamos finalizado el asunto de la financiación de las Haciendas Locales antes de que termine el año’.

Superávit

En lo tocante al superávit, Villalobos considera que esta cuestión ‘clama al cielo porque, otra vez, la injerencia en los asuntos locales hace que los que cumplimos, hayamos estado hasta la semana pasada, cuando se publicaron los PGE, a merced de los que no cumplen, teniendo a nivel nacional más de 7.000 millones de euros en las arcas municipales a la espera de que se aprobaran esos Presupuestos Generales del Estado, que ya me dirán ustedes qué tiene que ver una cosa con la otra’.

Acerca de esta cuestión, el presidente de la FAMP y de la Diputación ha ofrecido datos que hablan de ‘562 entidades locales andaluzas con su liquidación presupuestaria de 2016 efectuada, de las que 542 registraron superávit y solo 20 déficit’.  

Un total positivo, una vez detraído el déficit del superávit, que suma 1.147 millones de euros y donde la provincia de Sevilla fue además la más cumplidora, con 294 millones de superávit. ‘Y a pesar de contar con esos recursos, la arbitrariedad y la inacción desde determinadas instancias han impedido que los pueblos y ciudades de toda España, de Andalucía y de esta provincia hayan podido destinar parte de esas cantidades a inversiones que mejoran la calidad de vida de sus vecinos y vecinas y que, vuelvo a insistir, deberían dejarse a la potestad municipal para decidir el destino de las mismas’.

Techo de gasto

Sobre el mecanismo de techo de gasto, introducido en la Ley de Estabilidad de 2012, el conferenciante lo ha calificado como ‘la carcoma que apolilla la viga central de la arquitectura local, que es el presupuesto’.

Y ha vuelto a ofrecer datos, en esta ocasión de la propia diputación sevillana.

Según el presidente, ‘la capacidad de gasto no financiero de la Diputación de Sevilla ha disminuido un 3,91%, desde la entrada en vigor de la Ley de Estabilidad, algo inexplicable cuando somos una entidad que va a terminar el ejercicio en curso sin un solo euro de deuda bancaria’.

‘Y como nosotros, lamentablemente, hay hoy en día muchísimos Ayuntamientos y diputaciones, por lo que llevamos un buen tiempo reclamando que se flexibilice ese techo de gasto para las administraciones que cumplimos y que se aplique, en definitiva, el sentido común para permitir que, los que puedan, inviertan más en sus vecinos y vecinas’, ha enfatizado.

Plusvalías

Como cuarta cuestión de calado, el responsable de la FAMP y de la Diputación se ha referido al asunto de las plusvalías.

Ahí, considera que debe darse una respuesta cuanto antes, ‘aplicando el sentido común y no gravando el impuesto cuando no hay beneficio en la venta de un inmueble, pero dando respuesta a la vez a los perjudicados, que son los Ayuntamientos, porque estamos hablando de una tasa municipal que, al final, deja de entrar en las arcas municipales’.

Concretamente, Villalobos ha puntualizado que ‘la plusvalía es una fuente de ingresos municipales que, en 2015, permitió a los 8.122 municipios que hay en España ingresar 2.675 millones de euros -casi el 13% de los impuestos directos que recaudaron las entidades locales- y que, en Andalucía, dejó en 2015 un total de 267 millones de euros en las arcas locales’.

Cifras que conducen a que dicho gravamen suponga el 9,6% de la totalidad de las figuras impositivas que aplican directamente los Ayuntamientos a sus vecinos y vecinas, ‘por lo que retirar las plusvalías significa detraer uno de cada diez euros de los ingresos propios de los Consistorios, que sirven para prestar servicios a su gente’.

La otra cara de la moneda

Tras plantear los problemas que acucian al municipalismo, Villalobos ha ofrecido datos esperanzadores de la economía, para argumentar que, ‘si se acompasa la acción política con la marcha de la economía, la ecuación final puede ser positiva’.

Así, ha destacado por ejemplo que ‘en Andalucía hay un 3,3% más de afiliados a la Seguridad Social, un 3,3% más de ocupados y un 9,8% menos de desempleados, lo que ha hecho que la tasa de paro haya bajado casi un 3%’.

Ya en la provincia, esos datos de empleo, entre 2015 y 2017, se sitúan en un 6,36% más de ocupados, con 680.900 personas, y un descenso del paro del 20,45%, hasta las 243 mil personas.

El trabajo desde la Diputación de Sevilla

También ha hecho balance el presidente de los dos años de gobierno en clave provincial. Ahí, ha desgranado las inversiones ejecutadas durante estos dos años, donde destacan los más de 219 millones invertidos entre 2015 y 2017 en políticas sociales, los 32 millones empleados en la promoción turística, 103 en materia medioambiental y de dotaciones para el servicio de extinción de incendios, los 142 millones del Plan Supera -que serán casi 200 tras ejecutar el Supera V- y los más de 600 millones de euros en anticipos ordinarios y extraordinarios para los Ayuntamientos a través de OPAEF’.

A esos registros, Villalobos ha sumado ‘nuevos retos y compromisos’, como un plan de construcción para nuevos Consistorios; un programa de señalética para municipios; un nuevo FEAR con dos nuevas líneas de liquidez; nuevas dotaciones e incremento de recursos para los Planes de Urgencia Municipal; más inversiones en transparencia y participación ciudadana;  la inclusión de cláusulas sociales y de fomento de la igualdad en los requisitos que se soliciten para trabajar con la Diputación y, como cuestiones ‘especialmente destacadas’; ha vuelto a reclamar un Plan de Empleo al que se sumen todas las administraciones para disponer de más recursos en este ámbito; y ha ratificado la intención de poner en marcha nuevas ediciones del Supera, ‘imprescindible hoy día’.

De qué lado caerá el futuro

Después de desgranar todos esos asuntos, el responsable de FAMP y de la Diputación ha terminado diciendo que ‘el ímpetu de la sociedad civil se merece una clase política que acompañe a esa ilusión, con unos responsables políticos que den alas a las iniciativas y proyectos que los ciudadanos y ciudadanas levantan y sostienen a diario, acompasando la acción de gobierno a las empresas, a las necesidades e inquietudes de la gente’.

‘Y para eso -ha continuado-, los Ayuntamientos y diputaciones de España necesitamos espíritu colaborativo del resto de administraciones, siendo además dueños de nuestro futuro y decidiendo el destino de nuestras inversiones porque, solo así, el municipalismo postcrisis terminará cayendo del lado del optimismo’.

Presidente de la Cámara de Comercio

Por su parte, el Presidente de la Cámara de Sevilla, ha alabado la labor desarrollada por la Diputación, «gracias a esta entidad y a su Presidente, los ciudadanos de muchas poblaciones, especialmente las más pequeñas y aisladas, han encontrado ese amparo social, apoyo e impulso para convertirse en territorios dinámicos, modernos, y atractivos, cuyo punto en el mapa son hoy un referente de eficiencia, sostenibilidad, crecimiento, y desarrollo turístico». «

El Presidente de la Cámara cree sinceramente que, «el papel de las Diputaciones en este momento son una garantía de prestación de servicios a los los ciudadanos, que alientan e impulsan el desarrollo social y económico de nuestros pueblos. Un Municipalismo que nació de todos los que creemos que, bajo el paraguas de la democracia, del entendimiento de la colaboración y de la cooperación entre administraciones públicas, instituciones y empresas se puede crecer, avanzar y mirar al futuro con optimismo e ilusión, con ganas de impulsar proyectos que consoliden el avance de nuestra sociedad».

«Al igual que las diputaciones y Ayuntamientos, la Cámara de Comercio de Sevilla se siente un organismo vertebrador de la economía y las empresas de nuestra Provincia. Así desde la Institución que presido, he podido comprobar las potencialidades de cada unos de nuestros municipios, de sus riquezas, de las capacidades de sus empresarios y de su importante capital humano», ha expresado Herrero.

Fondo Europeo de Desarrollo Regional
una manera de hacer Europa